La cirugía íntima es un conjunto de técnicas quirúrgicas cuyo fin es mejorar estética o funcionalmente los genitales tanto masculinos como femeninos. Esto puede conllevar un grave riesgo, si se realiza sin la adecuada prevención, ya que menores han querido unirse a la moda de la cirugía vaginal estética.
Cirugía ginecológica y reconstrucción estética de los genitales
En lo que respecta a la operación del hombre, recibe el nombre de faloplastia y se trata de la reconstrucción estética de los genitales externos. El falotrasplante, es por tanto, una técnica que consiste en trasplantar un pene de un donante fallecido. Se utiliza tejido muscular del propio paciente, que se extrae del antebrazo, para construir un neopene.
Por su parte, la cirugía de la vagina puede deberse a una eliminación de una cicatriz dolorosa después del parto, el tratamiento del vaginismo que responde a una vagina demasiado estrecha o la reducción de ésta. También se puede realizar una corrección quirúrgica cosmética de los labios vaginales, ya que estos son, a gusto estético personal de cada paciente, unos labios demasiados grandes, por lo que se llevará a una reducción de labios vaginales, o demasiado pequeños, por lo que se procederá a un aumento del volumen de estos.
Dentro de la cirugía genital femenina diferenciamos entre cirugía vaginal de los genitales internos (vagina, himen, vía urinaria y vejiga) y la cirugía vulvar de los genitales externos (labios vaginales, capucha del clítoris, monte de venus y parte inferior de los muslos).